Beatriz Franco, una joven valenciana, viajó hace dos años hasta Josa, un pequeño pueblo turolense, para hacerse cargo del bar municipal. Un referente para que los jóvenes apuesten por el entorno rural y vuelvan a llenar la España Vaciada
Beatriz Franco, una joven valenciana, viajó hace dos años hasta Josa, un pequeño pueblo turolense, para hacerse cargo del bar municipal. Un referente para que los jóvenes apuesten por el entorno rural y vuelvan a llenar la España Vaciada